Es bien conocido por los mexicanos, que en la historia de nuestro país, hay un periodo oscuro, en el que, a consecuencia de “malas” decisiones y presiones políticas por parte de los Estados Unidos de América, México perdió gran parte de su territorio de la zona norte.
Esto se dio como consecuencia de la firma del Tratado de Guadalupe Hidalgo, y que detuvo una guerra que existía entre México y nuestros vecinos del norte.
¿El por qué de esta guerra?
Estados Unidos estaba en auge y tenía deseos de expandir sus fronteras. En 1809 compró Luisiana a Napoleón. Y en 1819, firma con España la cesión de Florida.
En 1822, Estados Unidos reconoce a México como una nación independiente, e intenta comprar Texas al gobierno mexicano. México rechazó esta oferta.
Hubo un momento en el que México tomo medidas, para fomentar la colonización de algunos de sus territorios del norte, entre ellos Texas. Ya que muchos de los nuevos colonos, eran provenientes de Estados Unidos.
Para el año de 1836, en Texas surgió un fuerte sentimiento independentista. México intento sofocar las sublevaciones producidas por este fenómeno. Texas declaró ese mismo año su independencia, pero México no la aceptó.
El año de 1845, marco sin lugar a dudas la historia del territorio, ya que Texas se convirtió en un nuevo estado de los Estados Unidos. Esto motivó la ruptura de relaciones entre ambos países, y finalmente el 13 de mayo de 1846, Estados Unidos declaró la guerra a México.
Después de más de un año de guerra, el presidente mexicano Santa Anna, que para ese entonces había vuelto del exilio, para encabezar la Guerra, se dio cuenta de que era una batalla perdida, y de nuevo abandona a la nación y regresa al exilio.
México se hundió en el caos. Pasaron varios días, sin nadie al frente del gobierno.
Manuel de la Peña y Peña, Presidente de la Suprema Corte de Justicia, se hizo cargo de la situación el 27 de septiembre de 1847.
Bernardo Caouto y Miguel de Atristáin, fueron asignados para comenzar las negociaciones de paz. Tensas y prolongadas negociaciones, para que el 2 de febrero de 1848, se firma en Guadalupe Hidalgo, el tratado de paz entre los dos países.
Éste, será conocido como Tratado de Guadalupe Hidalgo.
A consecuencia, México perdió gran parte de su territorio, California, Nevada, Nuevo México, Texas y Utah, entre otros, pasaron a manos del gobierno Norteamericano. México perdió más de dos millones de kilómetros cuadrados.
La pérdida de este territorio, es algo que sigue calando en México, se “regaló” un territorio repleto de recursos y oportunidades, un territorio que, por falta de carácter y determinación de los gobernantes de entonces, podría hoy en día, ser parte de nuestra basta nación.