Desde hace varios días, la agenda política ha estado marcada por un posible escándalo de grandes magnitudes.
Se sospecha de una conexión entre el equipo del actual presidente Donald Trump, y la inteligencia del gobierno ruso, todo esto desde un año antes de que se llevara a cabo el proceso de elección en los Estados Unidos.
El New York Times, informó que existen registros telefónicos y llamadas, que muestran a miembros de la campaña presidencial de Donald Trump, que tuvieron contactos con funcionarios de inteligencia rusos.
Esto ya sucedió alguna vez con el vecino del norte, cuando el presidente Richard Nixon fue “tumbado”, debido al Watergate.
Y ¿qué fue todo esto del Watergate?
Fue un escándalo, en el cual se descubrieron actividades ilegales por parte del equipo del republicano Richard Nixon, en su campaña electoral de 1972; la que marcó más y generó mayor controversia, fue la entrada ilegal al cuartel general del Partido Demócrata.
Luego de negarlo todo, de pericias legales, y acoso de opositores políticos, el presidente Nixon tuvo que renunciar al cargo, ante la gran presión que enfrentaba. Los periodistas del Washington Post, protagonizaron un papel fundamental en la historia, al dar a conocer toda esta información, gracias al informante conocido como ‘Garganta Profunda’.
La situación se pone caliente para Trump, ya que si todo esto se llegase a comprobar, tendría, no solo que dar las explicaciones pertinentes, y lo más importante de todo, sería considerar si es apto para gobernar uno de los países más poderosos del planeta.