Henry Ford diseñó el buque USS Eagle PE-56, para la Primera Guerra Mundial, sin embargo, el 23 de abril de 1945 la Marina de Estados Unidos notificó que se había hundido a causa de una explosión accidental, pero nadie supo dónde quedaron sus restos.
En 2001 la Marina indicó que el barco había sido atacado por un submarino alemán, cabe mencionar, que al inicio de la Primera Guerra Mundial, los países no le daban prioridad a los submarinos, ya que era un arma que no se había probado antes, los principales usos eran la defensa costera y la exploración, por ser tan silencioso podía atacar sin problemas, sin embargo, con el tiempo se convirtió en una de las principales armas marinas.
Después de 75 años, un grupo privado de buzos inició las investigaciones en 2014 para dar con el paradero del submarino y fue hasta junio de 2018 cuando fue localizado a 8 kilómetros de las costas Maine.
El barco fue encontrado a 91 metros de profundidad, cuando uno de los buzos tropezó con una gran pared de acero que en realidad era el Eagle PE-56.
El equipo de buzos trabajó junto con un especialista que les dio las coordenadas de la posible ubicación del buque.
“Tan pronto como encontramos los restos realmente queríamos que se contara esta historia», dijo uno de los buzos.
El hundimiento fue reclasificado como pérdida de combate.
Los Ojos de Cuervo 