Los secuestros, asesinatos, robos y demás delitos en contra de las mujeres continúan alrededor del mundo; todos los días las mujeres salen de sus casas a la escuela, al trabajo, a la tienda, a cualquier lugar con miedo de no regresar debido a la inseguridad que se vive.
Un ejemplo es el de Kierra Coles, una trabajadora postal de 27 años que vivía en Chicago y estaba embarazada. Fue vista por última vez el 2 de octubre de 2018 en Chatham y su fecha de parto era en abril de 2019.
La madre de Kierra reportó a la policía dos días después de no saber de ella, sin embargo, no han tenido noticia alguna sobre su paradero. El auto de la mujer se encontraba afuera de su domicilio, con su celular y su bolsa.
¿Qué sucedió entonces?
El novio de la madre aseguró haberla visto pasar junto a su auto en vez de entrar.
“Ella vio algo que la hizo girar tan rápido y cruzar la calle, y su auto estaba al otro lado de la calle”, aseguró el hombre.
En un inicio se ofrecía una recompensa de 23 mil dólares a quien diera información sobre su paradero, pero ahora subieron la cifra a 46 mil de recompensa.
Nadie sabe qué sucedió con Coles, ¿dónde está?, ¿pudo dar a luz?, ¿quién se la llevó?, o ¿por qué se fue? Son preguntas que los familiares no han podido resolver.
“Mantengo esta situación viva porque necesito a mi hija viva”, dijo la madre.
De acuerdo con un estudio, México es el país con más número de secuestros, seguido de Venezuela, Chile y Panamá. En México los estados con más secuestros son Veracruz, CDMX y Tamaulipas.
Es una situación en que las autoridades deben poner más atención, no es posible que todos los días las mujeres tengan miedo de salir de sus casas.