Los Warren eran un matrimonio conformado por Edward Warren Miney y Lorraie Rita Warren, que se dedicaba a investigar sucesos paranormales. Se conocieron a los 16 años, él se fue a luchar a la Segunda Guerra Mundial, pero regresó gracias a un permiso y después ambos trabajaron cazando demonios.
Sus investigaciones fueron tan populares que se convirtieron en películas, así fue como se creó el universo de “El Conjuro”, el cual ha logrado reunir la cantidad de 500 millones de pesos debido a su éxito.
El Conjuro, Anabelle, La Monja, son algunas de las películas que dicen estar basadas en los hechos reales que vivieron los Warren, pero ¿qué tan ciertas son estas historias?
Uno de los más famosos fue el caso de la granja de la familia Perron, en donde habitaba una bruja llamada Bathsheba que dio a su hijo en sacrificio comenzando una maldición. Se dice que la bruja declaró su amor por Satanás y se ahorcó en un árbol del patio de la granja, sin embargo, no se tienen pruebas reales de fantasmas o demonios.
Otro caso bastante popular es Anabelle, una muñeca que una mujer compró para su hija Donna, quien estudiaba enfermería. De repente notaron que la muñeca se movía por sí misma, después aparecía en otras habitaciones. Los Warren notaron que la muñeca estaba poseída y se la llevaron para colocarla dentro de una vitrina, sin embargo, se dice que los hechos que ocurrían no eran tan fatales como aparecen en la película.
La Monja fue otra de las películas exitosas de este universo, se dice que existió un demonio de nombre Valak que se aparecía en lugares religiosos, sin embargo, en el libro nunca describen al demonio en forma de monja, ni de mujer.
Se dice que los Warren contrataron al escritor Ray Garton para que escribiera la historia de una familia que tenía un hijo con cáncer y estaba poseído, pero nunca tuvo contacto con él.
“La familia era un desastre, pero sus problemas no eran de índole sobrenatural. Los Warren no podían ayudarlos. En el momento en que entrevisté a Carmen Snedeker, averigüé que estaba haciendo algún tipo de estafa en la lotería interestatal. Me instó en repetidas ocasiones a no mencionarlo en el libro y no decirle a nadie. Su hijo, alrededor del que se centró toda su historia, no estaba por ningún lado. Nunca lo conocí. Al parecer no tenía cáncer, sino más bien era drogadicto.” dijo Garton.
En resumen, todo indica que los Warren no tenían pruebas suficientes para confirmar los hechos, a pesar de existir fotos y audios, parece que no son del todo ciertas.