Aroha de 27 años de edad y Germán de 28, casados en Albacete, España, tuvieron un bebé llamado Omar que desafortunadamente falleció en 2018, a los 131 días de nacido. En un principio los padres aseguraron que fue por negligencia médica tras suministrarle una vacuna, pero la autopsia arrojó que fue por un traumatismo craneoencefálico.
Incluso la madre publicó en su cuenta de Facebook una foto del bebé con un mensaje que decía: “Esto lo van a pagar lo que te han hecho”.
Las autoridades abrieron una carpeta de investigación al respecto. Mientras tanto, los padres tuvieron otro hijo llamado Dylan, quien falleció el 29 de junio de 2019, misteriosamente también con 131 días de edad.
La muerte de Dylan tenía a los papás asustados, buscaron ayuda con sus vecinos porque el bebé no se movía y no respiraba, hasta que la ambulancia llegó y confirmó la muerte del niño.
Al cuerpo de Dylan se le realizó una autopsia y se descubrió que murió debido a las costillas fracturadas que presentaba, esto transcurrió aún cuando las investigaciones de la muerte de su primer hijo continuaban.
Luego de descubrir las causas de la muerte de Dylan, la Guardia Civil detuvo a los padres y ambos se fueron a prisión preventiva acusados de homicidio.
Sin embargo, Mari, la madre de Germán, asegura que su hijo es inocente: “Mi hijo es inocente y dejadnos en paz. Si queréis saber qué pasó hablad con Rosa, la madre de Aroha”.
La madre de Aroha dice que ha ido a visitar a su hija, pero que no le da respuesta a lo sucedido, sólo le pide que la saque de ahí. «Yo por ella metía la mano en el fuego, porque ha criado a dos sobrinas mías sola siendo una niña. Se levantaba cada tres horas, las cambiaba, las duchaba, les daba sus tomas».
Los padres se declaran inocentes, pero las pruebas dicen lo contrario, ¿qué pretendían con matar a sus hijos?, ¿por qué ambos murieron a los 131 días?, aún no se tienen respuestas.
Los Ojos de Cuervo 