El VIH es el virus de inmunodeficiencia humana que daña al sistema inmunitario al destruir a los glóbulos blancos. Su etapa final es el SIDA, siendo una de las epidemias más graves de las últimas décadas.
En el siglo pasado esta enfermedad provocó la muerte de miles de personas como el vocalista de Queen, Freddy Mercury o la supermodelo estadounidense Gia Carangi.
En la actualidad la enfermedad se ha ido desestigmatizado, sin embargo, la cura aún no ha sido encontrada y la persona más capaz de dar solución a esta enfermedad falleció en un avión.
Joep Lange era el científico que tenía más conocimientos sobre el SIDA en todo el mundo, fue el responsable de crear el coctel de antiretroviral que hoy logra mejorar la situación de los pacientes que están al borde de la muerte.
Llevaba más de 30 años trabajando en el tema y en los 90 fue nombrado jefe de investigación clínica y desarrollo de productos y drogas de la Organización Mundial de la Salud (OMS). A partir de ese momento se volvería un activista por el derecho de la gente a un acceso barato a los tratamientos contra el VIH.
Realizó un trabajo exhaustivo para demostrar el peligro del VIH en países subdesarrollados, centrándose en África donde miles de personas morían por no poder acceder a tratamientos.
“Si hoy por hoy podemos encontrar una lata de Coca Cola en cualquier parte de África, también podremos ofrecer en esos lugares tratamientos contra el SIDA”.– Joep Lange.
Sus esfuerzos lo convirtieron en una eminencia en el tema del SIDA, en sus últimos años de vida se desempeñó como director del Instituto de Ámsterdam para la Salud Global y junto a cientos de científicos buscaba crear una cura que no contaría con patente, sino con permiso legal de venta para facilitar el acceso a los menos favorecidos.
Según sus colegas todo parecía ir viento en popa, hasta que en 2014 Joep Lange tomó el avión Boeing 777-200 propiedad de Malaysia Airlines para dirigirse a Australia a atender a la 20ª Conferencia Internacional sobre el SIDA.
Un misil ucraniano pro ruso impactó con el avión a los 35 minutos de vuelo, haciéndolo estallar y matando a los 298 pasajeros, incluyendo al posible salvador del SIDA, Josep Lange.
¿La cura del SIDA se encontraba en el avión?
Fuentes
Los Ojos de Cuervo 