El año pasado surgió una noticia que conmocionó y enojó a miles de personas: la acusación de la enfermera Genene Jones, por haber causado la muerte de 60 niños y bebés.
La investigación se abrió en Texas, la cual demuestra que su primer denuncia radica en el año de 1981, por el asesinato de una niña de apenas dos años de edad. Hoy en día, los cargos se han incrementado exponencialmente, pues ahora se le acusa de 60 homicidios de menores. Además, las investigaciones de cada muerte coinciden con el historial laboral de la enfermera.
A Genene se le han asignado, por la prensa, varios apodos, los más populares son «el ángel de la muerte» y la «enfermera asesina».
Actualmente, la «enfermera asesina» se encuentra en la prisión de Lane Murray del Departamento de Justicia Criminal de Gatesville, Texas. En el año de 1984, fue condenada a 99 años de prisión, debido al homicidio de Chelsea McClellan, una bebé de 14 meses de edad. Posteriormente, obtuvo otro cargo de homicidio, por el bebé Rolando Santos, de apenas 4 semanas; la enfermera le inyectó Heparin. Sin embargo, hasta la fecha, Genene ha mantenido firme su palabra de ser inocente.
Otros bebés que fueron presas de esta enfermera sin alma, son: Rosemary Vega de 11 meses y Joshua Sawyer, cuando Genene trabajaba en el Hospital del Condado de Bexar, dentro de la unidad de cuidados intensivos de pediatría, durante 1981.
A pesar de los cargos de homicidio que tiene, la asesina será liberada en marzo de este año, debido a la ley que había en el momento cuando el «Ángel de la muerte» fue sentenciada. No obstante, apenas la dejen en libertad, será llevada al condado de Bexar, porque ahí serán los juicios que tiene pendientes por las denuncias recientes.